Eurybia latifasciata Hewitson 1870

12. Eurybia latifasciata Hewitson, 1870

(Fig. 66–67, ♂)

De todas la Eurybia que habitan Colombia, sin duda, esta es la más rara y local. Su coloración atípica con amplias bandas blancas que cruzan el área medial de las alas, la hace inconfundible y singular. Aunque Stichel (1924) clamaba en su momento la presencia por primera vez en Colombia de la especie, ya Fassl (1910), la había reportado para áreas cercanas a Villavicencio, Meta, con base en ejemplares que fueron depositados en el Museo de Historia Natural de Londres. Esta información es presentada por Seitz (1916) y D’Abrera (1994), quien ilustra precisamente 2 ♂♂ de dicha localidad. Examinando el poco material a nuestra disposición, distinguimos que su dorso alar es café en ambas alas, cruzadas por una gran banda curvilínea blanquecina a nivel medial, que se origina en el margen costal del AA y culmina en el torno alar del AP. Este patrón de color solo es interrumpido por un pequeño ocelo discal de pupila negra y un fugitivo punto azul violeta rodeado de un halo naranja claro, no hay vestigios de los 2 puntos blancos subcostales, ni manchas marginales típicas del género en ambas alas. La banda blanca se transluce en el reverso sobre un fondo grisáceo. Dicho patrón recuerda mucho a la de ciertas especies de Mesosemia Hübner (vgr. M. judicialis Butler y su forma latissima Stichel) con las que se puede confundir por las blandas blancas presentes también (ver Salazar et al. 2009). La ♀ de E. latifasciata fue ilustrada por Rebillard (1958), ella se dispone como el ♂, excepto que en el AP tiene ausente la banda blanca solo presente en el AA. Por este motivo fue llamada erróneamente por dicho autor como E. latifasciata silaceana nombre correspondiente a otra especie descrita por Stichel (1924).

Organos genitales masculinos (Fig. 96–98). Valva en vista lateral bifurcada, con dos brazos en forma de gancho, a diferencia de las demás especies, la valva inferior es ancha y corta y aguzada en su extremo. La valva superior es más corta y pequeña. Gnathos largos y robustos, de forma aguzada en el ápice. Uncus bastante ancho y redondeado dorsalmente. Tegumen ancho y pronunciado. Vinculum levemente curvado. Saccus relativamente más largo que el resto de especies. Aedeagus removido, grueso y curvo en la parte media y aguzado en la parte apical.

Distribución (Mapa 4). En Colombia esta rara especie, quizás una de las más primitivas; se encuentra en el piedemonte este de la Cordillera Oriental habitando el sotobosque. Desde hace algún tiempo se había intentado redescubrirla en la zona de Villavicencio con resultados infructuosos, hasta que uno de nosotros (ERH) la encontró más al sur en la bota caucana con solo 2-3 especímenes capturados. Un primer reporte visual de latifasciata fue publicado por Salazar (2020). Por otro lado, en la colección de Arnold Schultze recuperada de un viejo cofre depositado en el Museo de Historia Natural de Berlín, Alemania, aparecen 2 ♂♂ procedentes de nuestro país.

Material examinado. COLOMBIA: CAUCA: Piamonte-La Florida a 525 m, 2 ♂♂, Delgado, Ruiz y Henao leg. (MHNUCa-CI 1135, 1136), ibidem-La Florida, a 520 m, ♂, 4-V-22, J. Salazar leg. (CJS).