INTRODUCCIÓN
Se ha observado que la cultura y su influencia en el cuerpo impactan en la salud mental, existiendo estudios que relacionan las características colectivistas e individualistas de las distintas sociedades, con determinados trastornos psiquiátricos1. Estos estudios indican que las culturas colectivistas presentan mayor tendencia a manifestar sintomatología asociada a trastornos de conducta alimentaria (TCA) y/o trastornos de la imagen corporal (TIC), en comparación con las sociedades individualistas, en las que la asociación es menor1. Sin embargo, lo anterior contrasta con la evidencia que indica que en España (país individualista) existe una prevalencia de riesgo de desarrollar y mantener un TCA del 19% en población universitaria, mientras que en Chile (país colectivista) se observaría una prevalencia del 15% en la misma población2,3.
Los factores socioculturales resultan relevantes al momento de hablar de TCA, pues pueden someter a los individuos a experimentar distintas presiones respecto a la búsqueda de un determinado ideal corporal. Uno de los elementos relevantes es el referido al rol de género y el cómo este es transmitido a través de la presión ejercida por los medios de comunicación, la familia y el grupo de pares, estereotipando un estilo de cuerpo ideal que para ser alcanzado podría derivar en sintomatología de algún TCA y/o TIC4,5,6,7. En la literatura se evidencia que son las mujeres de 16 a 25 años quienes presentan mayor prevalencia de riesgo de padecer un TCA, siendo quienes más están influidas por las presiones sociales y los contextos en los que se desenvuelven4,8.
Diversos estudios demuestran que la mujer durante la etapa de la adultez emergente (de entre 18 a 29 años) se ve enfrentada a situaciones como el ingreso a la universidad y las exigencias del medio por tener un cuerpo ideal y mantener una alimentación saludable, todo lo cual traería consigo una alteración en la imagen corporal si es que no se alcanzan los estándares exigidos por la sociedad, lo que a su vez puede afectar negativamente la satisfacción corporal9,10,11.
Además de los factores sociales antes señalado, existen variables psicológicas individuales que se relacionan con la alteración de la imagen corporal y el riesgo de desarrollar o mantener un TCA y/o TIC, como lo son la baja autoestima, el perfeccionismo y la afectividad negativa12,13,14,15.
Ante lo expuesto es que se presentan dos problemáticas asociadas a la imagen corporal; la obsesión por la musculatura y la obsesión por la delgadez, las que actúan como sintomatología previa al padecimiento de un TCA y/o TIC y están influidas por los factores socioculturales y psicológicos presentados anteriormente10,16. Por consiguiente, se busca comparar la obsesión por la delgadez y la musculatura entre mujeres adultas emergentes universitarias de Chile y España, respecto a factores socio-culturales (rol de género, presión social de los medios de comunicación, familia y pares), satisfacción corporal y variables psicológicas vinculadas a la imagen corporal (perfeccionismo, autoestima, afectividad negativa).
MATERIAL Y MÉTODOS
Se utilizó un enfoque cuantitativo con un diseño no experimental, transversal, de alcance correlacional.
Participantes
Se utilizó un muestreo no probabilístico por conveniencia, alcanzando una muestra total de 230 participantes adultas emergentes de entre 18 a 29 años, pertenecientes a casas de estudio universitarias en Chile y España; 155 mujeres de la ciudad de Temuco, con un promedio de 22 años de edad (DE= 2,1; mínimo 18; máximo 29) y 75 mujeres de la ciudad de Barcelona con una media de 21 años de edad (DE= 2,36; mínimo 18; máximo 28). Se obtuvo estatura y peso por auto reporte y se calculó el Índice de Masa Corporal (IMC). Las mujeres españolas tuvieron un IMC promedio de 21,9 (DE= 3,8; Min= 17; Max= 37), y las chilenas un promedio de 23,3 (DE= 4,6; Min= 16; Max= 40). En cuanto al nivel socioeconómico (NSE), se evidenció que el 85,4% de la muestra española pertenece a un NSE medio y medio alto, mientras que en Chile fue de 67,6%. En cuanto a la actividad física, el 53,3% de las españolas refiere realizar actividad física con regularidad, mientras que, en el caso de Chile, el porcentaje fue de 31%.
En cuanto a la carrera universitaria, la mayor parte de la muestra fueron estudiantes de psicología (54,8%), seguidos por educación diferencial (11,7%) y trabajo social (8,3). El 25,2% se distribuye en otras carreras, como tecnología médica, diseño, etc.
Como criterios de exclusión, no se consideraron las personas en situación de discapacidad física, puesto que su imagen corporal está asociada a la funcionalidad de la persona17; y las mujeres embarazadas o quienes se encontraban amamantando, ya que durante este periodo se sufren diversas alteraciones en la imagen corporal18.
Instrumentos
Para esta investigación se utilizó una batería de 9 instrumentos, los cuales fueron autoadministrados:
Drive for Muscularity Scale19,20: instrumento que tuvo por objetivo medir conductas, acciones y percepciones acerca de la musculatura. Contiene 15 ítems en escala Likert con seis opciones de respuesta (1: nunca, 2: pocas veces, 3: a veces, 4: a menudo, 5: casi siempre y 6: siempre), de modo que a mayor puntaje, mayor es la preocupación por la musculatura. Se obtuvo un alfa de Cronbach en la muestra de Chile de 0,851, mientras que para España fue de 0,831, lo que da cuenta de que se trata de un instrumento confiable.
Sociocultural Attitudes Towards Appearance Questionnaire-421,22: instrumento que tuvo la finalidad de medir la incidencia de factores socioculturales, tales como los medios de comunicación, la familia y los pares, en relación a la insatisfacción corporal y el posible desarrollo de TCA. Contiene 22 ítems en escala Likert con 5 opciones de respuesta (1: completamente en desacuerdo, 2: muy en desacuerdo, 3: ni de acuerdo ni en desacuerdo, 4: muy de acuerdo,5: completamente de acuerdo) que se dividen en 5 subescalas, de las cuales en este estudio sólo se utilizaron 3 (presión de pares, presión familiar y presión de los medios de comunicación). A mayor puntuación, mayor presión social. Presentó un alfa de Cronbach para Chile en la subescala presión social de la familia de 0,900; pares 0,872 y medios de comunicación 0,976, asimismo para España, en la subescala presión social familiar se obtuvo un alfa de 0,927, en pares, 0,919 y para medios de comunicación 0,957.
Inventario del rol sexual23: instrumento que evaluó en qué medida las personas perciben en sí mismas ciertas características masculinas y femeninas. Está compuesto por 30 ítems, 15 de los cuales corresponden a la escala de Masculinidad y 15 a la escala de Feminidad. Se responde en una escala formato Likert con cinco opciones de respuesta (1: nunca o casi nunca, 2: rara vez, 3: algunas veces, 4: habitualmente, 5: siempre o casi siempre). Mientras más alto sea el puntaje en una escala, mayor es la autopercepción de características correspondientes a masculinidad o feminidad. Este instrumento se utilizó en la muestra chilena, obteniéndose un alfa de Cronbach para la escala de masculinidad de 0,819, mientras que para la escala de feminidad se obtuvo un alfa de Cronbanch de 0,830. En la muestra de España se utilizó un instrumento equivalente, el cual se señala a continuación:
Inventario de roles de sexo de Bem24: se compone de 12 reactivos que miden las diferentes características de los roles sexuales los que tienen 7 opciones de respuesta (1: nunca, 2: casi nunca, 3: algunas veces, 4: regularmente, 5: bastantes veces, 6: casi siempre, 7: siempre), de modo que a mayor puntaje mayor sería la afinidad por aquellas características que están socialmente aceptadas para un rol u otro. En la presente investigación se obtuvo un alpha de Cronbach para la escala de masculinidad de 0,793 y 0,853 para feminidad.
El Inventario de rol sexual utilizado en Chile se basó en las propuestas de Bem respecto a la elaboración de este instrumento, por lo que ambos siguen la misma fundamentación23. Debido a que el Inventario de roles de sexo de Bem24, utilizado en España, está compuesto por ítems en escala Likert de 7 puntos, en tanto que el Inventario de rol sexual, utilizado en Chile, consta de ítems en escala de 5 puntos, a fin de comparar ambos instrumentos se decidió para los análisis, dejar ambos en escala de 5 puntos, utilizando una regla de 3 para el caso español.
Escala de Autoestima de Rosenberg25: instrumento que se utilizó para medir autoestima, a través de 10 afirmaciones sobre los sentimientos que tiene la persona sobre sí misma, 5 direccionadas positivamente (ítems 1, 2, 4, 6 y 7) y 5 direccionadas negativamente (ítems 3, 5, 8, 9 y 10), con cuatro opciones de respuesta (muy de acuerdo, de acuerdo, en desacuerdo, muy en desacuerdo). Se obtuvo un Alpha de Cronbach para Chile de 0,876 y para España de 0,933.
Escala de Afecto Positivo y Negativo26: instrumento que evaluó la afectividad a partir de 20 ítems que se dividen en dos escalas, una encargada de evaluar el afecto negativo y la otra el afecto positivo. Los rangos de respuesta van desde 1 a 5 (1: muy levemente o nada; 2: un poco; 3: moderadamente; 4: bastante y 5: extremadamente). Las escalas mencionadas se evalúan de forma independiente, entendiendo que a mayor puntaje en la escala (positivo o negativo) se presentaría mayor afectividad (positiva o negativa). Para fines del presente estudio solo se consideró la escala de afecto negativo, para la que se obtuvo un alfa de Cronbach de 0,835 para España, y de 0,839 para Chile.
Eating Disorder Inventory-227,28: instrumento que evaluó características psicológicas y sintomatología asociada a TCA. Consta de 91 ítems con un formato de respuestas en una escala tipo Likert de seis alternativas (0: nunca; 1: pocas veces; 2: a veces; 3: a menudo; 4: casi siempre y 5: siempre). A mayor puntaje, mayor presencia de la variable correspondiente en cada escala. Para fines de este estudio se tuvo en consideración 20 ítems que evalúan las escalas de obsesión por la delgadez y perfeccionismo. Se obtuvo un alfa de Cronbach en la escala de obsesión por la delgadez para Chile de 0,887 y para perfeccionismo de 0,827, mientras que en España en relación a la obsesión por la delgadez se obtuvo un alfa de 0,812 y para perfeccionismo 0,852.
Multidimensional Body Self Relations Questionnaire29,30: instrumento que evaluó distintos aspectos de la imagen corporal. Consta de 69 Ítems, sin embargo, para este estudio solo se utilizaron 9, referidos al apartado de satisfacción con distintas partes del cuerpo, que se evalúa en escala Likert con 5 alternativas de respuestas (1: muy insatisfecho; 2: bastante insatisfecho; 3: punto medio; 4: bastante satisfecho; 5: muy satisfecho). De esta forma a mayor puntaje mayor satisfacción con el cuerpo o partes de este. Se obtuvo un alfa de Cronbach de 0,840 para Chile y 0,785 en España.
Cuestionario Sociodemográfico: cuestionario ad-hoc, que recolectó información sociodemográfica de las participantes (edad, nacionalidad, nivel socio-económico por autoadscripción). Además, se recogió información por auto-reporte de peso y talla, para calcular el índice de masa corporal (IMC) y se consultó a las participantes si realizan actividad física con regularidad.
Procedimiento y resguardos éticos
Luego de contar con la aprobación del Comité de Ética de la Universidad Católica de Temuco y contando con la autorización de los respectivos docentes, se accedió a salas de clase en universidades, a fin de realizar la aplicación grupal de los instrumentos, con una duración aproximada de 25 minutos. Previo a contestar los instrumentos, los sujetos firmaron un consentimiento informado, en que se enfatizó el derecho a participar voluntariamente y se manifestó que los datos serían confidenciales.
Análisis de datos
En la presente investigación se realizó el análisis de datos mediante el software SPSS 23 (IBM, Nueva York, Estados Unidos). Se generaron las medidas de tendencia central y variabilidad, a través de un análisis descriptivo de la muestra.
Se realizaron también análisis correlacionales con la prueba estadística r de Pearson y análisis de comparación de medias en las variables de interés, entre Chile y España, a través de la prueba t de Student. Debido a las diferencias existentes entre la muestra chilena y española respecto a actividad física e IMC, se decidió realizar ANCOVA respecto a la comparación por grupos en las variables dependientes (obsesión por la delgadez y obsesión por la musculatura), incorporando dos factores: nacionalidad y realización de actividad física; mientras que el IMC se incorporó como covariable.
Finalmente, se realizó un análisis predictivo con regresión lineal múltiple por pasos, a partir de los resultados de las correlaciones obtenidas anteriormente entre las variables. Para los análisis de regresión se trabajó con la muestra global, a fin de detectar si la nacionalidad actúa como predictor de las variables dependientes. Se consideró un nivel de significancia estadística de p<0,05.
RESULTADOS
Análisis de correlaciones
Para los análisis correlacionales se separó la muestra según país, encontrándose para Chile los resultados que se exponen en la tabla 1. En relación a la obsesión por la delgadez, se evidenció una correlación positiva, estadísticamente significativa, con presión social de los medios de comunicación (r= 0,46; p<0,01), de la familia (r= 0,55; p<0,01) y de pares (r= 0,46; p<0,01), además de afectividad negativa (r= 0,30; p<0,01), perfeccionismo (r= 0,39; p<0,01), satisfacción corporal (r= -0,56; p<0,01), IMC (r= 0,18; p<0,05) y rol de género femenino (r= 0,19; p<0,05). Además, se evidenció una correlación negativa entre obsesión por la delgadez y autoestima (r= -0,31; p<0,01), es decir, a menor autoestima, mayor es la obsesión por la delgadez.
Variables | Obsesión por la musculatura | Obsesión por la delgadez |
---|---|---|
Autoestima | −0,16 | −0,31** |
Presión social de los medios de comunicación | 0,14 | 0,46** |
Presión social de pares | 0,16 | 0,46** |
Presión social de la familia | 0,26** | 0,55** |
Afectividad negativa | 0,18* | 0,30** |
Perfeccionismo | 0,13 | 0,39** |
Satisfacción corporal | −0,21** | −0,56** |
IMC | 0,04 | 0,18* |
Rol de género femenino | 0,08 | 0,19* |
Rol de género masculino | 0,04 | 0,06 |
Obsesión por la delgadez | 0,24** | 1 |
Obsesión por la musculatura | 1 | 0,24** |
**p<0,01.
*p<0,05.
Por otra parte, y en relación con la variable obsesión por la musculatura en Chile, se encontraron correlaciones positivas con presión social de la familia (r= 0,26; p<0,01), afectividad negativa (r= 0,18; p<0,05), satisfacción corporal (r= -0,21; p<0,01) y obsesión por la delgadez (r= 0,24; p<0,01) (Tabla 1).
Por otro lado, en el caso de España (Tabla 2), las correlaciones encontradas en relación con la obsesión por la delgadez son obsesión por la musculatura (r= 0,24; p<0,05), presión social de los medios de comunicación (r= 0,28; p<0,05), presión social de pares (r= 0,435; p<0,01), presión social de la familia (r= 0,42; p<0,01), afectividad negativa (r= 0,44; p<0,01), satisfacción corporal de forma inversa (r= -0,55; p<0,01), perfeccionismo (r= 0,27; p<0,05) e IMC (r= 0,37; p<0,01).
Variables | Obsesión por la musculatura | Obsesión por la delgadez |
---|---|---|
Autoestima | 0,01 | −0,02 |
Presión social de los medios de comunicación | 0,12 | 0,28* |
Presión social de pares | −0,03 | 0,44** |
Presión social de la familia | 0,19 | 0,42** |
Afectividad negativa | 0,16 | 0,44** |
Perfeccionismo | 0,23* | 0,27* |
Satisfacción corporal | −0,18 | −0,55** |
IMC | −0,06 | 0,37** |
Obsesión por la delgadez | 0,24* | 1 |
Obsesión por la musculatura | 1 | 0,24* |
Rol de género femenino | −0,07 | −0,07 |
Rol de género masculino | −0,06 | −0,05 |
**p<0,01.
*p<0,05.
Por último, para la obsesión por la musculatura en España, se encontraron correlaciones con perfeccionismo (r= 0,24; p<0,05) y con obsesión por la delgadez (r= 0,24; p<0,05).
Análisis de comparación
Se evidenció en las estudiantes universitarias españolas una mayor obsesión por la musculatura (p<0,05), mayor satisfacción corporal (p<0,05) e identificación con características femeninas (p<0,001). Por otro lado, para las estudiantes universitarias chilenas se observó una mayor presión social familiar (p<0,05) y de pares (p<0,05), además de un mayor IMC (p<0,05) y una mayor identificación con características masculinas (t= -2p<0,05) (Tabla 3).
M | DE | p | ||
---|---|---|---|---|
Obsesión por la musculatura | Chile | 23,96 | 8,964 | 0,005** |
España | 27,54 | 8,673 | ||
Obsesión por la delgadez | Chile | 5,96 | 6,175 | 0,623 |
España | 6,37 | 5,119 | ||
Índice de masa corporal | Chile | 23,33 | 4,548 | 0,024* |
España | 21,9 | 3,776 | ||
Rol de género masculino | Chile | 3,18 | 0,58 | 0,005** |
España | 2,92 | 0,771 | ||
Rol de género femenino | Chile | 3,5 | 0,596 | <0,001** |
España | 3,89 | 0,691 | ||
Presión social de la familia | Chile | 9,16 | 4,781 | 0,025* |
España | 7,64 | 4,703 | ||
Presión social de pares | Chile | 6,7 | 3,388 | 0,006** |
España | 5,41 | 3,056 | ||
Presión social de los medios de comunicación | Chile | 12,14 | 5,618 | 0,161 |
España | 13,24 | 5,36 | ||
Perfeccionismo | Chile | 10,07 | 6,892 | 0,442 |
España | 9,32 | 6,963 | ||
Afectividad negativa | Chile | 23,93 | 7,181 | 0,971 |
España | 23,97 | 7,136 | ||
Autoestima | Chile | 3,07 | 0,567 | 0,788 |
España | 3,09 | 0,673 | ||
Satisfacción corporal | Chile | 3,18 | 0,668 | 0,014* |
España | 3,4 | 0,585 |
**p<0,01
*<0,05
Se realizó además ANCOVA, a fin de analizar las diferencias por nacionalidad en obsesión por la delgadez y la musculatura, controlando las variables IMC y actividad física. De este modo, se corroboró lo señalado anteriormente, respecto a que no existen diferencias entre los grupos en obsesión por la delgadez (p>0,05), pero sí en obsesión por la musculara (p<0,05), en que las españolas manifestaron puntuaciones más altas.
Análisis de regresión lineal múltiple
Tras los datos obtenidos en el análisis correlacional, se realizó un análisis predictivo para obsesión por la delgadez, incorporando también la variable referida a actividad física, donde se obtuvo un modelo explicativo compuesto por las variables de satisfacción corporal, presión social de la familia, presión social de los medios de comunicación, perfeccionismo y nacionalidad española; explicando así el 45% de la varianza (R2 ajustado= 0,45) (Tabla 4).
Coeficientes estandarizados Beta | p | |
---|---|---|
Satisfacción corporal | −0,36 | <0,001 |
Presión social de la familia | 0,28 | <0,001 |
Presión social de los medios | 0,16 | 0,008 |
Perfeccionismo | 0,14 | 0,015 |
Nacionalidad* | −1,13 | 0,019 |
*La nacionalidad española fue codificado como 0 y la nacionalidad chilena como 1.
Por otro lado, en relación a la obsesión por la musculatura, se ha evidenciado un modelo explicativo compuesto por las variables de obsesión por la delgadez, actividad física, presión social de la familia y nacionalidad española. Lo mencionado, explica el 16% (R2 ajustado= 0,16) de la varianza (Tabla 5).
Coeficientes estandarizados Beta | p | |
---|---|---|
Obsesión por la delgadez | 0,17 | 0,028 |
Actividad física* | 0,23 | <0,001 |
Nacionalidad** | −0,18 | 0,008 |
Presión social de la familia | 0,16 | 0,035 |
*El realizar actividad física de manera regular se codificó como 1, mientras que el no realizar actividad física regularmente, como 0;
**la nacionalidad española fue codificado como 0 y la nacionalidad chilena como 1.
DISCUSIÓN
Respecto a las diferencias en cuanto a la obsesión por la delgadez y la musculatura entre mujeres de Chile y España, los principales resultados destacan, por una parte, que en el caso de Chile se observa un mayor impacto de la presión social familiar y de pares, lo que se podría explicar por el tipo de sociedad a la que pertenece este país, siendo un contexto cultural colectivista caracterizado por otorgar mayor importancia a las percepciones de los demás1. En la misma línea, algunos autores31,4 coinciden en que la familia podría actuar como un factor de riesgo y/o protector por la transmisión de normas, roles, hábitos o actitudes de los padres sobre el peso y la alimentación, que influyen significativamente en la percepción de la imagen corporal. Existen estudios que exponen la relación entre la dinámica familiar y el riesgo de desarrollar un TCA, en que se destacan aspectos como las reglas y límites estrictos, escasa comunicación y la presencia de intrusión32,33. Junto a esto, en Chile se encontró mayor identificación con características masculinas que en España, lo que parece constituir parte del autoconcepto de la mujer chilena, principalmente de aquellas que cuentan con un mayor nivel educativo, identificándose con conceptos como la independencia y el liderazgo, aspectos tradicionalmente vinculados a al rol de género masculino34.
Por otro lado, en Chile se ha encontrado un menor interés de las mujeres por alcanzar un cuerpo tonificado y musculoso, lo que posiblemente se relacione con las ideas acerca del cuerpo, su belleza y cuidado que se han ido construyendo sobre la base de la delgadez como ideal corporal y al ámbito de lo femenino35.
A diferencia del resultado en Chile, las mujeres españolas se identifican más con características femeninas, posiblemente relacionadas con los intereses por la moda y el consumo de la belleza y estética36, lo que se ve reflejado en estudios sobre el auge de revistas españolas de alta gama que anuncian cánones estéticos atribuidos a la talla, edad, tendencias de ropa y en aconsejar como lucir más bella37.
En cuanto a la obsesión por la delgadez en Chile, se evidencia una correlación significativa e inversa con autoestima y positiva con perfeccionismo, resultado que coincide con lo observado en pacientes con anorexia nerviosa, quienes presentan características premórbidas de perfeccionismo y baja autoestima. Por otra parte, en pacientes con bulimia nerviosa es frecuente la presencia de ansiedad e irritabilidad en los episodios bulímicos, siendo estados anímicos asociados a la afectividad negativa38,39, lo que en el presente estudio también se asocia a obsesión por la delgadez.
Por otro lado, las correlaciones encontradas en España para la obsesión por la delgadez coinciden con lo señalado en un estudio previo40 que indica que la insatisfacción corporal se relaciona directamente con las influencias socioculturales que fomentan la internalización del modelo estético corporal. Con respecto a la correlación entre obsesión por la musculatura y obsesión por la delgadez, es un resultado que también va en la línea de lo observado en una investigación anterior en que se establece la asociación entre la internalización del modelo estético corporal de delgadez y la preocupación por la musculatura en mujeres usuarias y no usuarias de gimnasio41.
Respecto a la obsesión por la delgadez, se evidencia un modelo predictivo del 45% compuesto por diversas variables, presentando mayor riesgo de desarrollar obsesión por la delgadez las mujeres españolas, lo que efectivamente va en la línea de los datos de prevalencia donde España (19%) a comparación de Chile (15%) presenta un porcentaje más elevado de TCA en mujeres universitarias2.
Por otra parte, para obsesión por la musculatura se observa un modelo predictivo que explica el 16% de la varianza, considerando las variables de obsesión por la delgadez, presión social de la familia, actividad física y nacionalidad española. Lo último, se ha vinculado a la evolución de los países desarrollados y la excesiva preocupación por la imagen corporal42.
En general, el correlato psicológico de la obsesión por la musculatura en mujeres aún no está del todo claro43 de ahí la importancia del presente estudio, al aportar al esclarecimiento de este aspecto. Existen investigaciones, como la de Pritchard, Parker y Nielsen44, que al igual que los resultados aquí obtenidos, establece una asociación entre la actividad física y la obsesión por la musculatura. Se hace necesario, sin embargo, continuar investigando en esta dirección.
Los resultados de este estudio han de ser comprendidos considerando la principal limitación de esta investigación, que es la disparidad en el tamaño muestral de ambos países.
Finalmente, se concluye que los factores estudiados efectivamente impactan sobre la obsesión por delgadez y la musculatura en las mujeres, comprendiendo de esta forma la relevancia tanto de aspectos externos como internos vinculados con la imagen corporal, que afectan en mayor o menor medida dependiendo del contexto cultural en que se desenvuelve la persona. Es por ello que este estudio da pie a una comprensión más acabada sobre las problemáticas planteadas haciendo posible articular esta información en programas de promoción y prevención de los TCA o TIC, además de incentivar a futuras investigaciones enfocadas en la obsesión por la musculatura en mujeres en pos de proporcionar mayor contenido teórico de una problemática incipiente en este género.
Se hace necesario, por lo tanto, continuar investigando respecto a estos temas en mujeres, particularmente respecto a la obsesión por la musculatura, pues es algo que ha recibido menor atención y que, sin embargo, resulta interesante de explorar y comprender.