INTRODUCCIÓN
La necesidad de unificar los términos anatómicos utilizados por los anatomistas alrededor del mundo, de tal manera que su referencia sea única y comprendida por todos, dio lugar para que, convocados por la Sociedad Alemana de Anatomía, éstos se reunieran y decidieran elaborar un documento que compilara y unificara los nombres de las estructuras anatómicas descubiertas hasta la época. El trabajo fue encargado a Wilhelm His y sus colaboradores Kölliker, Hertwig, Kollmann, Merkel, Swallow, Toldt, Waldeyer, actuando como secretario, Bardelebe (His, 1895); y que culminó con la aprobación y posterior publicación de la Nomina Anatomica de Basilea.
Varias fueron las reuniones y congresos que se realizaron posteriormente para revisar Nomina Anatomica, así en 1903 en Nancy (Francia), se propuso la creación de la Federación Internacional de Asociaciones de Anatomía (FIAA). En 1935 se revisa y modifica Nomina Anatomica existente, a la que se denominó Jena Nomina Anatomica. (Acuña et al., 2007; Álvarez Guisbert & Campohermoso Rodríguez, 2007).
En 1950, en Oxford se estableció el Comité de la Nomenclatura Anatómica Internacional (IANC), y en 1955 en París, se acordó adoptar una nomenclatura latina basada en la Basilea Nomina Anatomica (BNA). Fue denominado: Paris Nomina Anatomica (PNA).
El Comité Internacional de Nomenclatura Anatómica publicó en 1989 la sexta edición de la Nomina Anatomica sin someterla a la revisión de la FIAA ni a la aprobación del XIII Congreso celebrado en Río de Janeiro, esto causó un conflicto con Federación Internacional de Asociaciones de Anatomía, por lo que se crea el Comité Federativo de Terminologia Anatomica (FCAT). En 1998 se creó Terminologia Anatomica Internacional, que a diferencia de la Nomina Anatomica, no solamente incluye la terminología en latín, sino también en inglés, además proporciona una distribución semántica que permite una identificación más objetiva de la estructura anatómica, la que contempla la asignación de un código a cada término y representación de las relaciones entre las estructuras (Whitmore, 1999; Fabry et al., 2006; Vandaele & Harvey, 2013).
En la configuración de la Nomina Anatomica y Terminologia Anatomica se establecen algunas similitudes, tales como el uso del latín como idioma universal para denominar las estructuras anatómicas, el valor informativo y descriptivo de las mismas y la supresión de epónimos y homónimos (Duque Parra et al., 2002; Álvarez Guisbert & Campohermoso Rodríguez; Echeverría Pereda & Jiménez Gutiérrez, 2010). Sin embargo, aún no se logra una armonización y estandarización completa de los términos en latín traducidos para los diferentes idiomas (Vásquez & del Sol, 2015), e inclusive hay términos que tienen un uso incorrecto del caso, género y número, sobre todo en la segunda y tercera declinaciones (Marecková et al., 2001).
Bajo este hecho, se consideró necesario analizar los sustantivos y adjetivos utilizados en la Terminologia Anatomica (Comité Federativo sobre Terminología Anatómica; International Federation of Associations of Anatomists & Sociedad Anatómica Española, 2001), para nominar a los ramos del nervio etmoidal anterior e infratroclear tomando como parámetros la descripción anatómica de los mismos, así como su estructura gramatical latina.
MATERIAL Y MÉTODO
Se realizó un análisis de Terminologia Anatomica publicada y aprobada por el Comité Federativo sobre la Terminología Anatómica (FCAT), correspondiente a los ramos del nervio nasociliar, derivado del nervio oftálmico, en cuanto a su estructura gramatical. Luego se buscó y comparó las descripciones de dichos nervios antes de la aprobación y publicación de la primera Nomina Anatomica en 1895 y luego de ella.
Para la selección de los textos de anatomía publicados antes de la aparición de la primera Nomina Anatomica, se determinó como criterio de inclusión el acceso virtual a los textos de anatomía gratuitos disponibles en la página web Open Library (2018), desde 1835, así como la relevancia de sus autores. Luego de la aparición de la primera Nomina Anatomica se seleccionó textos de anatomía de los autores clásicos en nuestro medio.
Los documentos se clasificaron en dos grupos: aquellos documentos escritos antes de la publicación de la primera Nomina Anatomica y los que aparecieron luego de la misma; en cada documento se analizó la descripción detallada sobre el nervio nasociliar, ramo del trigémino. En segundo lugar, se clasificaron los documentos que describían cada uno de los ramos terminales del nervio nasociliar, tanto en singular como en plural.
Finalmente se revisó la estructura gramatical de los nombres de los ramos terminales del nervio nasociliar en latín y se comparó con los nombres descritos en la primera Nomina Anatomica y Terminologia Anatomica.
RESULTADOS
En Terminologia Anatomica actual se observó que el nervio oftálmico (Nervus ophthalmicus), primera rama del trigémino que se encuentra con el código A14.2.01.016 tienes tres ramas principales que son el nervio nasociliar (Nervus nasociliaris), el nervio frontal (Nervus frontalis) y el nervio lagrimal (Nervus lacrimalis).
La codificación de los ramos del nervio nasociliar se puede observar en la Tabla I.
Cuando el nervio nasociliar llega próximo al foramen etmoidal anterior, se divide en sus ramos terminales: el nervio etmoidal anterior y el nervio infratroclear.
El nervio etmoidal anterior atraviesa el foramen etmoidal anterior y llega a la fosa craneal anterior, cruza la lámina cribosa del etmoides y desciende por la fisura etmoidal a la cavidad nasal, en donde se divide en dos ramos: ramo nasal medial, del cual se desprenden fibras nerviosas para el tabique nasal; y el ramo nasal lateral, del cual se desprenden fibras nerviosas para la parte anterior de la pared lateral de la cavidad nasal y tegumentos nasales.
El nervio infratroclear se dirige anteriormente entre los músculos oblicuo superior del ojo por arriba y el margen superior del músculo recto medial del ojo por abajo, e inferior a la polea de reflexión del músculo oblicuo superior del ojo se divide en dos ramos: palpebral superior y palpebral inferior.
DISCUSIÓN
De la revisión realizada en la literatura anatómica y tomando como base la descripción propuesta por algunos autores clásicos del siglo XIX, el nervio etmoidal anterior se describe como el ramo terminal medial del nervio nasal (nasociliar), el cual, luego de haber ingresado en la cavidad orbitaria entre los orígenes del músculo recto externo del ojo, superior al nervio óptico, se dirige por la pared medial de la órbita ósea hasta el foramen etmoidal anterior para cruzarlo y llegar a la cavidad craneal, atravesando la lámina cribosa del hueso etmoides y llegando a la cavidad nasal, en donde emite dos ramos: uno medial, que se distribuye por la mucosa del tabique nasal, y otro lateral, que se dirige por las paredeslaterales de la mucosa y llega a inervar también los tegumentos del ala y punta nasal. Por su parte, el nervio infratroclear se origina en el foramen etmoidal anterior, se dirige hacia adelante por debajo de la tróclea del músculo oblicuo superior del ojo, llega al ángulo medial del ojo en donde se comunica con el nervio supratroclear y proporciona ramos para el saco y carúncula lagrimal, conjuntiva, tegumentos de los párpados superior e inferior y nariz (Knox, 1831; Wilson, 1855; Gray, 1858; Jones, 1894).
En la primera Nomina Anatomica se puede observar los términos en latín dedicados a los ramos del nervio nasociliar (Fig. 1).
Esta Nomina Anatomica tiene errores gramaticales y de descripción en cuanto a la nominación en latín de los términos asociados a los ramos derivados del nervio nasociliar; si tomamos en consideración la descripción que los autores clásicos realizaron sobre ellos, es decir, un ramo nasal “interno” y un ramo nasal “externo” derivados del nervio etmoidal anterior (conocido como nervio nasal interno); por tanto, correspondería para el sustantivo “ramo” el caso nominativo, el género masculino, el número singular, de la segunda declinación, el término en latín para este sustantivo sería ramus; para el adjetivo “nasal” correspondería el caso nominativo, género masculino, número singular, de la tercera declinación, por lo que el término en latín para este adjetivo sería nasalis ya que los adjetivos de segunda clase terminados en consonante como “consul” se flexionan por la tercera declinación; y, en relación al adjetivo “interno” sigue las mismas reglas gramaticales que el sustantivo ramo, por tanto se denominaría con el término latín internus y externus respectivamente.
Es importante indicar que en los textos clásicos de anatomía del siglo XIX consultados no se describen ramos nasales anteriores derivados directamente del nervio etmoidal anterior, como lo da a entender la organización jerárquica del nervio nasociliar de la primera Nomina Anatomica, sino que estos se derivan del ramo nasal externo del ramo etmoidal anterior, conocido como nasal interno (Jamain et al., 1874).
Nomina Anatomica y Terminologia Anatomica conserva el error de número gramatical en latín en el término correspondiente al ramo nasal interno (Dauber, 2006), pese a que los autores clásicos anatomistas del siglo XX describieron a este ramo como número singular (Lockhart et al., 1965; Testut & Latarjet, 1978; Rouvière & Delmas, 2006; Standring, 2008), sin embargo, otros autores no especificaron si se trata de uno o varios ramos nasales internos (Leong, 1986; Latarjet & Ruiz Liard, 2010; Velayos, 2012; Moore et al., 2013; Pró, 2014). Shankland (2001) describe tres ramos originados del nervio etmoidal anterior: un ramo septal, un ramo lateral y un ramo anterior o superficial.
Es posible también que se haya usado inapropiadamente el genitivo en el caso de “rami nasales interni” y se haya preservado desde la primera Nomina Anatomica, y como una solución compensatoria, toda la expresión se transformó en el plural con el uso del adjetivo, que es lo que suele ocurrir según Marecková et al.
CONCLUSIONES
Por la evidencia señalada, se propone cambiar el término que tiene el código A14.2.01.031 a ramus nasalis internus observando la pertenencia al caso nominativo, género masculino, número singular de la segunda declinación para los términos ramus e internus; y al caso nominativo, género masculino, número singular de la tercera declinación para el término nasalis.
Además, se propone cambiar el término que tiene el código A14.2.01.036 a ramus palpebralis superior observando la pertenencia al caso nominativo, género masculino, número singular de la segunda declinación para ramus; caso nominativo, género masculino, número singular de la tercera declinación para el término palpebralis y superior; y en estas mismas características gramaticales del latín, incluir el término ramus palpebralis inferior.
Debe haber sido una tarea muy ardua para His y sus colaboradores recopilar toda la información existente en esa época sobre las estructuras anatómicas descubiertas y descritas en diversas partes del mundo y en diferentes idiomas, y además organizarlas de tal manera que se tenga una estructura normalizada y común para todos los anatomistas. Si revisamos en la actualidad los textos de anatomía clásicos, descriptivos, topográficos, funcionales y clínicos, podemos apreciar que aún persisten descripciones diferentes de una estructura, tal como ha sido presentado en este estudio.