Chilean street artists and instagrammable heritage activism: Movement intellectuals of O-18

This paper introduces Chilean artistas callejerxs as powerful movement intellectuals (Eyerman, 1992, 2004) who curated the O-18 movement through their narration of the protestors’ hopes for the future, grievances in the present moment, and a visual representation of their painful dictatorial heritage. Central to this paper is the elucidation of Jones, Mozaffari, and Jasper’s (2020) newly postulated concept of Heritage Activism through a critical heritage studies lens. By focusing on the second, under-theorised element of their thesis – activists’ utilisation of heritage while in pursuit of social change – this work establishes the pivotal role of heritage in the Chilean uprising. It explores not only the prominent role heritage can play in social movements generally, but also the increasing influence and authority that social media such as Instagram allows street artists to possess in modern protests.

Resumen: Artistas callejeros chilenos y activismo de herencia instagramable: Intelectuales del movimiento del 18-O

Este artículo presenta a los artistas callejeros chilenos como poderosos intelectuales del movimiento (Eyerman, 1992, 2004) que comisariaron el movimiento O-18 a través de su narración de las esperanzas de los manifestantes para el futuro, las quejas en el momento presente y una representación visual de su dolorosa herencia dictatorial. Un aspecto central de este trabajo es la elucidación del concepto recientemente postulado por Jones, Mozaffari y Jasper (2020) de Activismo del Patrimonio a través de una lente de estudios críticos del patrimonio. Al centrarse en el segundo elemento, poco teorizado, de su tesis – la utilización del patrimonio por parte de los activistas en la búsqueda del cambio social – este trabajo establece el papel fundamental del patrimonio en el levantamiento chileno. Explora no sólo el destacado papel que el patrimonio puede desempeñar en los movimientos sociales en general, sino también la creciente influencia y autoridad que las redes sociales, como Instagram, permiten a los artistas callejeros en las protestas modernas.